Los científicos han reportado que los ríos de lava alcanzan más de 61 metros en el aire y la aparición de ocho nuevas grietas en la isla
Univisión
LOS ÁNGELES, EU.- El número de viviendas destruidas en la isla de Hawaii por la lava que emana del volcán Kilauea subió este domingo a 26, luego de que las autoridades confirmaran el dato tras un recorrido aéreo sobre la isla.
Con este anuncio, los habitantes del archipiélago quedan aún con menos esperanzas de regresar a sus hogares.
Los científicos del Observatorio de Volcanes del archipiélago, adjunto al Servicio de Geología de Estados Unidos (USGS), han reportado que los ríos del magma se han convertido en algunos casos en especies de fuentes que alcanzan más de 200 pies (61 metros) en el aire. Se calcula que hay unas 10 grietas en la isla, unas más activas que otras.
“Hay más magma en el sistema para entrar en erupción. Mientras haya lava la erupción continuará”, dijo a la agencia AP Wendy Stovall, volcanóloga del USGS, al referirse a la fisura más activa.
Cuatro nuevas estructuras no especificadas quedaron cubiertas por la lava, dijeron funcionarios del condado de Hawaii tras revisar las cifras el domingo. El Observatorio de Volcanes de Hawaii publicó un boletín hacia las 9:40 pm del domingo informando sobre las nuevas grietas. La última se abrió el sábado por la noche. Todas se encuentran en la zona de Leilani Estates, desde donde fueron evacuados 1,700 habitantes el jueves, al igual que los de Lanipuna Gardens.
Si bien algunas grietas siguen emitiendo chorros de lava, otras se han detenido. En tanto el dióxido de azufre, un gas que causa una calidad de aire “extremadamente peligroso”, sigue escapando del suelo en algunos lugares.
La agencia de Defensa Civil del archipiélago alertó que“la actividad eruptiva” estaba “aumentando y debería continuar”, haciendo énfasis en la imprevisibilidad de este evento natural.
Después de una cadena de sismos de mediana y gran intensidad, la tarde del pasado jueves el volcán Kilauea en Hawaii entró en erupción y la lava comenzó a correr por la isla, lo que ameritó una rápida declaración de estado de emergencia.
Las autoridades hawaianas indicaron que las viviendas destruidas se encuentran en la subdivisión Leilani Estates, donde la roca fundida, los gases tóxicos y el vapor han estado saliendo desde chimeneas en el suelo creadas por el volcán.
El jueves se ordenó la evacuación de unos 700 edificios y mil 700 personas mientras las corrientes de lava del Kilauea serpenteaban en los bosques. Desde entonces, algunos han podido regresar momentáneamente a sus casas, solo en aquellas zonas que las autoridades consideran sin riesgo.
La mayoría de los evacuados se han refugiado en el centro Red Cross. Los medios locales aseguran que hay más de 200 personas y 90 mascotas en él. Pero las autoridades han informado que muchos decidieron no salir de sus casas.
El viernes, los medios hablaban de decenas de temblores que se sintieron en la isla. Pero dos de ellos fueron los que la sacudieron con más fuerza, el mayor con una magnitud de 6.9 en la escala de Richter y con epicentro en la misma zona en la que ocurrió otro mortal en 1975 y que dejó al menos dos muertos y 28 heridos.
El sábado por la noche, el USGS en su reporte hablaba de al menos dos nuevas fisuras y nuevos derrames de lava menores. Y para entonces calculaban que en los dos días anteriores habían vivido unos 152 temblores de magnitud 2 y y 22 de magnitud 3.
Kilauea es uno de los cinco volcanes de la isla y uno de los más activos del mundo. Ha estado continuamente en erupción desde 1983. Por eso es de los más visitados por los cientos de miles de turistas que llegan anualmente a Hawaii.