Las imágenes de escuelas, teatros y hospitales bombardeados han llevado a la comunidad internacional
Redacción
WASHINGTON, EU.- La guerra de Ucrania ha dejado ya 3.6 millones de refugiados y 6.5 millones de desplazados internos, el mayor movimiento humano en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Las imágenes de escuelas, teatros y hospitales bombardeados han llevado a la comunidad internacional a buscar acción -al menos diplomática- para exigir respeto a los principios humanitarios.
De los 193 miembros de la ONU, 140 votaron en la Asamblea a favor de esta resolución presentada como “humanitaria”, sólo cinco países en contra (Rusia, Bielorrusia, Siria, Eritrea y Corea del Norte), mientras que 38 se abstuvieron, algunos de ellos aliados tradicionales de Moscú como Cuba, Argelia o Armenia.
La votación de este jueves repite casi calcados los resultados del pasado 2 de marzo, recién comenzada la guerra, cuando 141 países votaron contra la invasión rusa en parecidos términos, que “deploraba” la agresión y pedía su cese inmediato, y muestra la soledad de Rusia en la escena internacional, aunque sigue contando con el apoyo más o menos explícito de China.
Rusia habla de ‘plan humanitario’ sin nombrar al agresor
Durante dos semanas, Rusia ha tratado de contraatacar las iniciativas “occidentales” con un texto propio de contenido humanitario que presentó también como humanitario y que ayer el Consejo de Seguridad rechazó al tener el apoyo solamente de China.
Aquel texto hablaba de proteger a los civiles, garantizar su evacuación y salvaguardar edificios públicos, pero sin aludir al papel de Rusia como agresor ni mencionar siquiera su nombre, algo que fue calificado de una burla por numerosos países occidentales.
Hoy Rusia tuvo un aliado circunstancial, como fue Sudáfrica, que presentó ante la Asamblea un texto alternativo al francomexicano -también sin citar siquiera a Rusia- con el argumento de que no había que politizar las cuestiones humanitarias y que las razones políticas del conflicto debían tratarse en otros foros, como dijo la delegada sudafricana.
Con información de DW