Con la presencia del gobernador Quirino Ordaz Coppel como testigo de honor, el académico recibió el doctorado número 36 otorgado por la universidad
Jorge Quevedo
CULIACÁN, Sin.- El académico, ingeniero y fisicoquímico mexicano Enrique Fernández Fassnacht recibió hoy de la Universidad Autónoma de Sinaloa el doctorado Honoris Causa.
Con la presencia del gobernador Quirino Ordaz Coppel como testigo de honor, Fernández Fassnacht recibió el doctorado número 36 otorgado por la UAS en medio de aplausos de académicos, exrectores de la casa rosalina, senadores, diputados y alcaldes.
Durante su discurso, Fernández destacó la pérdida de cobertura educativa por la deserción escolar en la educación superior en México señalando que es necesaria una certificación de alumnos en instituciones de reconocida calidad.
Otro desafío, dijo es la pertinencia de la educación superior y el que los profesionales cuenten con elementos para enfrentar los retos de su área, apostando a la divulgación científica ante los recortes presupuestales.
“La excesiva evaluación no sólo ha desvirtuado sus objetivos, sino que ha generado estructuras de poder”, precisó al considerar que es necesario fortalecer la carrera académica en el país.
Dijo que el actual modelo de financiamiento no garantiza abatir los rezagos de la educación y no estimula la participación de los involucrados y tampoco aclara la transparencia, para lo que mencionó es necesario un acuerdo nacional.
Sugirió además un nuevo diseño institucional en la educación que apuntale cobertura, pertinencia y calidad, señalando a la heterogeneidad como obstructora de la relación de los académicos.
Refirió que han aumentado escuelas particulares las cuales no cumplen con requerimientos mínimos y ofrecen carreras que se encuentran saturadas en el mercado laboral por lo señaló deben existir regulaciones para disminuir opciones de poca calidad o fraudulentas.
“Esta es la ruta que los actores debemos construir para garantizar el futuro de desarrollo de México”, destacó.
Enrique Fernández Fassnacht fue uno de los cinco finalistas en el concurso para seleccionar al primer mexicano que viajaría al espacio con el fin de realizar diversos experimentos, además de poner en órbita el satélite Morelos 4.
Recibió la Medalla Gabino Barreda por haber logrado el más alto promedio de calificaciones en los estudios de doctorado en la Universidad Nacional Autónoma de México en 1985.
Fue director general del Instituto Politécnico Nacional desde noviembre de 2014 hasta el 19 de noviembre de 2017.