El Ayuntamiento había anunciado el cierre del malecón de Altata a vehículos de lunes a domingo
Jorge Quevedo
ALTATA, Sin.- Son las 16:00 horas de este viernes y el malecón del puerto de Altata luce vacío por lo que ante las nulas ventas los vendedores ambulantes y restauranteros exigen la apertura del inmueble a vehículos.
Tras los dos años de pandemia esperaban una recuperación ligera durante este periodo vacacional, pero las circunstancias no los favorecen.
Desde hace más de 30 minutos los más de 130 ambulantes y representantes de los 50 restaurantes se reunieron para abordar al gobernador Rubén Rocha Moya que se encuentra de descanso en el puerto.
La exigencia es la misma: la apertura del malecón a la brevedad, acusando además una desmedida invasión de ambulantes sin aparente autorización del Ayuntamiento para su operación.
“Si no hay gente en Altata no podemos dar los 200 (cuota diaria al Ayuntamiento)”, expresó una vendedora en un chat de redes sociales.
De no considerarse la apertura del malecón los ambulantes advierten pérdidas en miles de pesos en pescados, mariscos y otros insumos para la venta que sostiene a más de 600 familias de la región.
El Ayuntamiento había anunciado el cierre del malecón de Altata a vehículos aplicando la medida desde el pasado lunes hasta el domingo próximo.
Este jueves un sin fin de vehículos se volcaron desde Culiacán a las playas de Navolato, aunque todo parece indicar su destino es Isla Cortés, El Tambor, Yameto y El Tetuán, principalmente.