Debemos prepararnos para una gran fiesta, fueron sus palabras, tras saludar a los niños y darles la bienvenida
Redacción
CIUDAD DEL VATICANO.- Las sonrisas iluminaron el Aula Pablo VI del Vaticano en el 87 cumpleaños del Papa Francisco.
Las de los niños del dispensario Santa Marta que, como es tradición, festejaron al Pontífice con sus canciones y abrazos, y lo que pide el Papa de cara a la Navidad.
“Debemos prepararnos para una gran fiesta”, fueron sus palabras, tras saludar a los niños y darles la bienvenida a los pies del escenario de la Sala Nervi.
Con la ayuda de artistas circenses del Circo Vassallo, los niños del Dispensario realizaron acrobacias y números de clown ante el Papa, entre los aplausos del cumpleañero, de las cerca de 200 familias de los pequeños asistidos por el centro pediátrico vaticano, de los voluntarios de Athletica Vaticana que los acogieron, del presidente, el cardenal Konrad Krajewski, prefecto del Dicasterio para el Servicio de la Caridad, y de la directora, sor Anna Luisa Rizzello.