No fue Messi esta vez quien decidió, sino la pegada de Luis Suárez, atento a los balones sueltos en el área. No faltaron tampoco las manos de Ter Stegen
Marca
CIUDAD DE MÉXICO.- El Barcelona hizo lo que se esperaba con poco brillo, como ya es habitual, aunque recuperó uno de sus mejores argumentos.
No fue Messi esta vez quien decidió, sino la pegada de Luis Suárez, atento a los balones sueltos en el área. No faltaron tampoco las manos de Ter Stegen en lances claves.
A estas alturas de Liga, la fiabilidad del Barcelona está fuera de discusión. Lo demostró despachando medio partido soso, especialmente por la escasa participación de Messi. Pero Valverde ha generado una red de seguridad que permite salir con desahogo de un día discreto de su estrella.
El pasado año fue el talento de Neymar -y su capacidad para desquiciar a los rivales- lo que decidió en Butarque, esta vez fue Luis Suárez quien resumió las distancias en Butarque.
Mermado en su maltrecha rodilla, el uruguayo se tiró un cuarto de hora doliéndose de la articulación, tras porfiar con Zaldua en el área. Eso no le impidió revolverse como un muelle cuando Cuéllar dejó suelto un centro chut de Alcácer y embocar a puerta vacía para hacer más sencilla la tarea.
Esta vez el Lega no se abrió como el pasado año, cuando cayó goleado a la contra. Administró sus recursos, se ordenó bien y fió sus opciones al juego de espaldas de Amrabat y las entradas en segunda línea.
Pudo obtener premio en el primer tiempo, pero de nuevo Ter Stegen sostuvo al líder. Fue clave para alcanzar el descanso con ventaja, cuando bloqueó un remate envenenado de Szymanowski que buscaba el poste. Después, ya con Beauvue en el campo, interceptó un mano a mano al delantero francés que garantizó la ventaja barcelonista.
Garitano dio vueltas al plan y, tras cambiar de punta, metió a Gumbau en el campo. Valverde respondió relevando al lateral diestro y al interior zurdo.
Mejoró el líder, que ganó consistencia especialmente en el área contraria. Con la coyuntura favorable, Messi encontró más espacio e hizo de las suyas.
Le bastó con controlar una pelota en zona de medios para descubrir el desmarque profundo de Alcácer, que volvió a aprovechar su ocasión. Le dejó solo, remató duro el valenciano y la buena parada de Cuéllar encontró a Suárez bien colocado. Resolvió de volea y liquidó el partido.
El Lega comprendió que tenía poco que rascar, aunque siguió generando opciones. Beuvue tuvo una tras una combinación con Zaldua, pero faltó pausa para rematar.
En cambio, se redimió Cuéllar en una doble parada frente a Messi y Suárez. Parecía cerrado el duelo, pero la entrada de Paulinho garantiza animación hasta el final.
El brasileño acudió al área pequeña a buscar una pelota rebañada por Messi y metió la puntera para hacer el 0-3. Demasiada renta por juego, pero indiscutible por la efectividad de un líder que contempla el derbi desde las alturas.
Foto: Récord