Apareció Hirving Lozano, seguido de un nuevo ‘remate de delfín’ de Chicharito y un tiro libre magistral de Héctor Herrera
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CIUDAD DE MÉXICO.- A 12 minutos del final, la selección mexicana estaba coqueteando con el precipicio que sin duda iba a hacer crecer la ya de por sí alta pila de críticas que rodea a Juan Carlos Osorio.
Un golazo de Shahdon Winchester tenía al frente a Trinidad y Tobago entrando a los últimos minutos, pero apareció Hirving Lozano, seguido de un nuevo ‘remate de delfín’ de Chicharito y un tiro libre magistral de Héctor Herrera que le dieron el triunfo a México en su último partido del Hexagonal en casa.
Tres goles en los últimos 15 minutos que maquillan una mala actuación, en términos generales, del tricolor.
Lo mejor de la primera mitad se dio antes del silbatazo inicial, cuando la afición coreó el ‘Cielito Lindo’, el himno retumbó el Alfonso Lastras, se hizo un homenaje a los rescatistas –Frida incluida– y un altamente emotivo minuto de silencio. Sin embargo, en la cancha pasó poco o nada, con México monopolizando la pelota sin claridad, siendo trinitarias las opciones más cercanas, porque tampoco es que fueran demasiado peligrosas para Jesús Corona.
Tras el descanso, México salió más conectado y Jesús Manuel Corona desbordó una y otra vez por la derecha, pero el peligro que merodeaba el arco visitante no se convirtió en gol.
Entraron Lozano y Vela, pero eso más bien frenó al tricolor en lugar de revolucionarlo para finalmente romper el cerco trinitario.
Fue el jugador de la Real el que inició el gol de los visitantes.
Cometió una fuerte falta en sector ofensivo, Trinidad cobró rápido, Levi Garcia peinó y Shahdon Winchester definió como crack ante la salida de Corona.
A México le costó responder. Entró Oribe Peralta por Diego Reyes, proponiendo un partido de matar o morir, pero simplemente no llegaban las llegadas hasta que Oribe abrió para Layún, el del Porto mandó una diagonal que no encontró a Chicharito, pero apareció el mexicano en mejor momento, Hirving Lozano, para prolongar su idilio con el gol que tiene desde que cruzó el charco para rescatar a México.
Esto abrió el cerrojo trinitario. Regresó el peligro latente sobre el arco visitante y apareció Javier Hernández, con su olfato goleador que le ha llevado a ser el máximo anotador de la selección.
‘Tecatito’, quizás el mejor de la cancha, hizo todo salvo vencer a Foncette, quien rechazó en dirección de Hernández, quien remató ‘de delfín’, como lo hiciera alguna vez con el United, para dar el triunfo.
En la última jugada del partido, Héctor Herrera la colgó de la escuadra para anotar tres tantos por apenas segunda vez en el Hexagonal.
México termina sus partidos en casa en la eliminatoria, quizás con más preguntas que respuestas de cara al Mundial que ya había asegurado a inicios de septiembre.
Le quedan 10 meses a Osorio para terminar de perfilar el equipo que buscará, de una vez por todas, superar la barrera de los octavos de final.
