Desde que arrancaron los trabajos de esta legislatura se ha observado un comportamiento inadecuado del presidente de la Mesa Directiva, destaca el líder del tricolor en el Poder Legislativo
Redacción
CULIACÁN, Sin.- Por segunda semana consecutiva en sesión ordinaria de la legislatura, el grupo parlamentario del PRI fue agredido por manejo faccioso por parte del presidente de la Mesa Directiva, diputado Marco César Almaral Rodríguez, por lo cual la bancada priista exige un cambio de actitud por parte del legislador, pues no propicia el óptimo desarrollo de los trabajo de la legislatura.
Acompañado de la legisladora Gloria Himelda Félix Niebla, el coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, Sergio Jacobo Gutiérrez, argumentó que desde que arrancaron los trabajos de esta legislatura se ha observado un comportamiento inadecuado del presidente de la Mesa Directiva.
“Sólo ha evidenciado inexperiencia, incapacidad y manejo faccioso de la presidencia, al ser omiso en las solicitudes de nuestros compañeros para hacer uso de la palabra”, manifestó.
Sergio Jacobo agregó que Marco César Almaral Rodríguez privilegia siempre en la lista de oradores a los miembros de otros grupos parlamentario, llegando a un extremo intolerable como faltarle el respeto a la diputada Gloria Himelda Félix, negándole la palabra al referirle que ella fue aspirante a conducir los trabajos legislativos.
La diputada Gloria Himelda Félix Niebla acotó que el presidente de la Mesa Directiva ha interpretado incorrectamente toda la normatividad en su conjunto.
“El PRI respeta porque sabe ser oposición, en el PRI no hay gente improvisada, aquí hay políticos de carrera, aquí le entendemos, tan entendemos nuestra realidad que hoy sabemos que somos una minoría, pero no por ello permitiremos que se rebase la legalidad de este parlamento”, concluyó.
Ante estos hechos, el líder de la bancada priista en el Congreso del estado aseguró que la próxima semana planteará a la Junta de Coordinación Política un extrañamiento al presidente de la Mesa Directiva, demandando un cambio de actitud, porque consideró que de lo contrario los trabajos del Congreso no se desarrollan en las mejores condiciones.





